Crítica de Solo asesinatos en el edificio por JPQP
Redactada:
2022-11-08
Una temporada que en general es peor que su predecesora.
Tiene sus puntos buenos, como disfrutar más de los personajes secundarios (incluso profundizando en ellos) o la relación entre los protagonistas que nos ahorra todo esos momentos incómodos del comienzo cuando no se conocían, además de que casi no hay conflictos entre el grupo.
Ahora bien, el caso es peor. El caso de la primera temporada ya no me gustó cuando lo primero que hacían era relacionarlo con el pasado de uno de los protagonistas (tropo que me aburre demasiado), pero luego le daban un giro que, aunque previsible, le daba una cierta vuelta de tuerca al concepto inicial.
Aquí aunque con una capa distinta, acaban repitiendo el mismo patrón ( nos cuelan el tema del cuadro como fuera a ser vital y es solo parte del red herring, además de estar relacionado con el pasado de Charles), y también el mismo estilo de poner sospechosos muy evidentes para distraer al público de lo que son los verdaderos red herrings que servirán para tapar la identidad de culpable.
A su favor diré que era más fácil seguir la investigación y las pistas que se van dejando (aunque hay que estar atentos porque hay que saber ver qué pistas no llevan a nada); también aunque se relaciona con el pasado como en la temporada previa, lo hace con un elemento que nos plantearon antes que es el del podcast de Cinda , con lo que no es una historia que presenten de repente y de manera conveniente al espectador, sino que este ya tiene conocimiento de ella.
Lo que pasa es que además de los red herrings, hay un montón de elementos en la historia de los personajes que no tienen nada que ver con el crimen y que aunque podrían funcionar por ser parte de su construcción (o para profundizar en ellos) acaban no llevando a nada porque dejan a los personajes en el mismo sitio: Charles tontea con Jan cuando contacta con ella, para cortar con ella otra vez en un par de episodios; Oliver descubre que su hijo en realidad no es su hijo, simplemente para que ambos decidan pasar del tema; Mabel conoce a Alice que es uno de los red herrings y empiezan a salir, para descubrir que ella la está usando y decidir alejarse, para al final simplemente acabar juntas otra vez...
En definitiva no es una mala temporada, pero donde en la anterior consideraba que le faltaba muy poco para un diez, aquí bajan el nivel, probablemente para intentar hacerlo todo más sorprendente o distinto, y acabar repitiendo los mismos errores de la primera.
Tiene sus puntos buenos, como disfrutar más de los personajes secundarios (incluso profundizando en ellos) o la relación entre los protagonistas que nos ahorra todo esos momentos incómodos del comienzo cuando no se conocían, además de que casi no hay conflictos entre el grupo.
Ahora bien, el caso es peor. El caso de la primera temporada ya no me gustó cuando lo primero que hacían era relacionarlo con el pasado de uno de los protagonistas (tropo que me aburre demasiado), pero luego le daban un giro que, aunque previsible, le daba una cierta vuelta de tuerca al concepto inicial.
Aquí aunque con una capa distinta, acaban repitiendo el mismo patrón ( nos cuelan el tema del cuadro como fuera a ser vital y es solo parte del red herring, además de estar relacionado con el pasado de Charles), y también el mismo estilo de poner sospechosos muy evidentes para distraer al público de lo que son los verdaderos red herrings que servirán para tapar la identidad de culpable.
A su favor diré que era más fácil seguir la investigación y las pistas que se van dejando (aunque hay que estar atentos porque hay que saber ver qué pistas no llevan a nada); también aunque se relaciona con el pasado como en la temporada previa, lo hace con un elemento que nos plantearon antes que es el del podcast de Cinda , con lo que no es una historia que presenten de repente y de manera conveniente al espectador, sino que este ya tiene conocimiento de ella.
Lo que pasa es que además de los red herrings, hay un montón de elementos en la historia de los personajes que no tienen nada que ver con el crimen y que aunque podrían funcionar por ser parte de su construcción (o para profundizar en ellos) acaban no llevando a nada porque dejan a los personajes en el mismo sitio: Charles tontea con Jan cuando contacta con ella, para cortar con ella otra vez en un par de episodios; Oliver descubre que su hijo en realidad no es su hijo, simplemente para que ambos decidan pasar del tema; Mabel conoce a Alice que es uno de los red herrings y empiezan a salir, para descubrir que ella la está usando y decidir alejarse, para al final simplemente acabar juntas otra vez...
En definitiva no es una mala temporada, pero donde en la anterior consideraba que le faltaba muy poco para un diez, aquí bajan el nivel, probablemente para intentar hacerlo todo más sorprendente o distinto, y acabar repitiendo los mismos errores de la primera.
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