Crítica de Black Mirror por AlbertoCS

Una vuelta a los orígenes, como suele decirse. La tecnología vuelve a estar presente en cada episodio, aunque sirva sólo como excusa, y eso nos vuelve a llevar a esos futuros no demasiado lejanos, presentes ya tangibles en muchas ocasiones, en los que los avances tecnológicos nos permiten llegar a lugares con los que antes ni podíamos soñar. Y está bien porque en algunos capítulos eso ha servido para algo malo, pero en otros para algo bueno, lo cual sirve para mostrar que la tecnología como tal no es ni buena ni mala, somos nosotros los que podemos aprovecharla o abusar de ella en uno u otro sentido. No ha habido ni un capítulo malo, aunque el tercero me ha parecido un poco más desconectado de la tónica general de la temporada que el resto. El primero y el quinto muy emocionales en el buen sentido de la palabra, y el resto con un toque nerdie bastante divertido en ocasiones, sin dejar de lado la mala baba y la crítica social. Buen regreso de Black Mirror.