Crítica de Pearl Diver por jdmorris

Pearl diver (Buscador de perlas) es un corto animado de Margrethe Danielsen dividido en tres partes, y solo dos de ellas están conectadas aunque funcionen por sí solas. Todas nos hablan de parejas.
La primera son un erizo y un globo, mal empieza la cosa... En lo que se ve podemos interpretar al principio una diatriba entre si lo que hace el erizo está dentro de lo normal en cuanto a ceder en una relación o está renunciando a su naturaleza y es un cambio demasiado drástico para él. Parece ser más bien lo último, puesto que es algo que no funciona, es imposible el equilibrio, y ahí ya podemos pensar en que se refiere a relaciones destinadas al fracaso desde el principio, o tóxicas, o dolorosas, llamémosle X.
La de los bichos en el trozo de hielo, es que no sé de qué especie son, la verdad, parece que tienen plumas, pero no me cuadra nada. Lo que sí veo es que el pequeñito es muy tierno y el grandote es para darle un sartenazo. Aquí juegan con nosotros un poquito también, no te esperas lo que va a pasar.
Y por último, dos ostras en el fondo del mar, que al principio me han recordado a mis horarios y los de mi mujer, pero luego se puede pensar también en algo del tipo de que cuando cada uno va en una dirección o está en un momento de su vida o se quieren cosas distintas, la cosa no va a ir bien. Pero también en algo tan sencillo como: no dejes pasar el tiempo, lánzate y aprovecha antes de que sea demasiado tarde.
Curioso. Se puede ver, aunque el regustillo final es un pelín amargo.