Crítica de Liberad a Willy 2 por Lince

Hay un dicho que le viene que ni pintado a esta película, segundas partes nunca fueron buenas y es lo que le ocurre a Liberad a Willy 2.

Fue tal el boom de la entrañable orca Willy que siguieron con la saga, error, si no tienes muchas cosas que ofrecer.

El bajón con respecto a la primera entrega es considerable. Toda la primera mitad de la película no ocurre absolutamente nada, solo se ven orcas en el mar, los chicos todo el rato tocando la armónica y algún que otro baño con estos mamíferos y la aparición de un odioso personaje, el hermano de Jesse, sí, ahora Jesse tiene un hermano por parte de su madre biológica al que acogen por la muerte de ésta .

No es normal tirarse media película contemplando las orcas y que no pase nada, sí, son escenas bonitas pero un ratito vale no media película, luego debido al accidente de un carguero y el fuel que se expande por el mar es cuando la película cambia un poco el ritmo y empiezan a aparecer cosas interesantes en la trama.

Las orcas, la familia de Willy, se ven amenazadas por el fuel y deben ser rescatadas. Todo es muy lineal y previsible pero claramente la película va de menos a más, con un final que personalmente me ha gustado bastante por el ambiente de cierta tensión y buena fotografía e imágenes que muestran al espectador a través de la pantalla.

Las interpretaciones mantienen el nivel, siendo correctas, como en la primera película pero tampoco es que la trama de para mucho lucimiento cuando casi no ocurre nada, parece más un documental en la primera mitad del largometraje, lo único valorable es grabar con orcas de verdad que no tiene que ser nada fácil.

En definitiva, una trama simple que se hace muy larga hasta que empieza la acción, siendo en general poca cosa si la comparamos con la primera. Solo el final se salva, pero que no le da para que la apruebe.

Personalmente no la recomiendo porque no ofrece nada nuevo ni que merezca la pena, con ver la primera película es más que suficiente.

P.D. La banda sonora es de largo lo mejor de la película contando otra vez con Michael Jackson con el tema Childhood y con The Pretenders con el tema Forever Young en los créditos finales.