Crítica de Killing for the Prosecution por Sergiojamon

Abogados y caso que no llega a ninguna parte.

Una película de abogados que no llama mucho la atención y que termina viéndola cuando no tienes nada mejor que ver. En cierta manera te llevas una sorpresa al terminarla de ver, porque no es algo que te “esperas”, porque el caso inicial es del todo normal, pero a partir de ese momento, más o menos por la mitad, parece que no va a ningún sitio la trama y termina siendo lo más confusa posible.

El director no sabemos muy bien el que esperaba conseguir con esta entrega y si tenía pensado el seguir haciendo más, aparte de esta.

Al menos nos quedamos con la buena actuación de muchos de los actores que componen el reparto, en especial a uno de los “malos” de la trama, que nos puede llegar a recordar muy bien a un psicópata que le da igual todo o aun demente sin escrúpulos, es sin lugar a dudas lo mejor de la película.

La banda sonora bien situada en el momento oportuno, ya que según vamos viendo en las dos horas que dura la filmación, nos damos cuenta que escasea mucho, pero que cuando suena, encaja a la perfección, no siendo la genérica que se suele usar en este tipo de películas.

Bueno, en resumen, terminará defraudando, aunque tenga buenas cosas, ya que su punto primario es el más flojo, llamémosle “trama escasa”. No podemos hacer nada, si queréis podéis echarle un vistazo por la simple curiosidad, aunque luego terminéis odiándola. Tampoco es de esas películas de que mejor no ver desde un principio, gracias a los puntos buenos, que no llegan a ser pocos.