Crítica de El año en que empecé a masturbarme por gjulo
Redactada: 2023-08-04
Os recomiendo dedicar el tiempo que dura la película a masturbaros porque ganaréis más y así ponéis en práctica el argumento. Suecia, ese país diferente. El debut como directora de Erika Wasserman pretende ser divertido, pero resulta muy tibia como comedia romántica, drama o a establecer relaciones en profundidad. Como mucho conseguirá que alguna espectadora se masturbe un poco más los días posteriores a visionar esto. Una película más propia de una sobremesa de RTVE, ahora que casi todas las películas son escandinavas, aunque igual por horario infantil...
Se nota que es un largometraje realizado en plena cultura Woke y después del Me too, así que el co** es lo primero (os vais a cansar de escuchar la frase en la película) La vida de Hanna se viene abajo antes de cumplir los 40 cuando su novio la deja entonces comienza a cuestionarse sobre su vida. Hanna va dando tumbos, al igual que la película. Zigzaguea entre escenas embarazosas y presuntamente divertidas, Por ejemplo: "Recomiendo nuestras vieiras pescadas en un entorno compatible con el clima". O también, una niñera que cuida de los niños llama a los padres cuando llevan una hora en el restaurante: "Sois sus figuras de apego". Eh, sí, nosotros somos sus padres, y tú eres la niñera a la que pagamos para que cuide de ellos mientras nosotros nos divertimos, ¡así que haz tu trabajo! , pero sin hacer avanzar directamente la trama. La directora debió pensar tú haz lo que te salga del co**, y así lo plasmo en el filme. Básicamente, si estás lo suficientemente relajada como para poder masturbarte, la situación está bien. Si no lo estás, hay un desequilibrio en tu vida. Hanna definitivamente no está relajada , así que tienes que darle la vuelta y masturbarte hasta que se relaje. Y a partir de ahí su vida comienza a mejorar, y comieron perdices. Los cambios que realiza son inapreciables. Hanna pasa de ser apreciada en el trabajo a recaer en una adolescente irresponsable, sólo para ser rescatada por la idea de ponerse a sí misma en primer lugar, lo que se manifiesta principalmente en pausas para masturbarse en el trabajo. Con eso parece ser suficiente. De repente, todos vuelven a su vida: su mejor amiga, sus colegas, incluso su pareja. Lo dicho una película olvidable, pero la moraleja es que si no puedes pagar la hipoteca o tienes cualquier problema, tú mastúrbate en tu horario laboral, si no no vale, y al cabo de unos días, será como si te hubiera tocado la lotería y tus problemas desaparecerán. Aparte que te aparecerán amigos por todas partes, así que tampoco necesitaras los donettes de rigor ... Vamos, que son todo ventajas.
Se nota que es un largometraje realizado en plena cultura Woke y después del Me too, así que el co** es lo primero (os vais a cansar de escuchar la frase en la película) La vida de Hanna se viene abajo antes de cumplir los 40 cuando su novio la deja entonces comienza a cuestionarse sobre su vida. Hanna va dando tumbos, al igual que la película. Zigzaguea entre escenas embarazosas y presuntamente divertidas, Por ejemplo: "Recomiendo nuestras vieiras pescadas en un entorno compatible con el clima". O también, una niñera que cuida de los niños llama a los padres cuando llevan una hora en el restaurante: "Sois sus figuras de apego". Eh, sí, nosotros somos sus padres, y tú eres la niñera a la que pagamos para que cuide de ellos mientras nosotros nos divertimos, ¡así que haz tu trabajo! , pero sin hacer avanzar directamente la trama. La directora debió pensar tú haz lo que te salga del co**, y así lo plasmo en el filme. Básicamente, si estás lo suficientemente relajada como para poder masturbarte, la situación está bien. Si no lo estás, hay un desequilibrio en tu vida. Hanna definitivamente no está relajada , así que tienes que darle la vuelta y masturbarte hasta que se relaje. Y a partir de ahí su vida comienza a mejorar, y comieron perdices. Los cambios que realiza son inapreciables. Hanna pasa de ser apreciada en el trabajo a recaer en una adolescente irresponsable, sólo para ser rescatada por la idea de ponerse a sí misma en primer lugar, lo que se manifiesta principalmente en pausas para masturbarse en el trabajo. Con eso parece ser suficiente. De repente, todos vuelven a su vida: su mejor amiga, sus colegas, incluso su pareja. Lo dicho una película olvidable, pero la moraleja es que si no puedes pagar la hipoteca o tienes cualquier problema, tú mastúrbate en tu horario laboral, si no no vale, y al cabo de unos días, será como si te hubiera tocado la lotería y tus problemas desaparecerán. Aparte que te aparecerán amigos por todas partes, así que tampoco necesitaras los donettes de rigor ... Vamos, que son todo ventajas.
Guion
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Banda sonora
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Interpretación
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Efectos
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Entretenimiento
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