Críticas de El terror no tiene forma
Logeate para poder valorar esta película
Una malévola forma de vida viscosa irrumpe en un tranquilo pueblo de Arborville. No tiene problemas de conciencia ni inteligencia alguna, y sólo sabe hacer una cosa, pero es todo un experto en ello: comerse todo lo que se mueve, hombres, mujeres o niños.
RESEÑAS Y VALORACIONES DE El terror no tiene forma
- Ordenar por:
- SOLO CRÍTICAS
- MEJOR VALORADAS
- PEOR VALORADAS
- PRESTIGIO USUARIO
- MAS ACTUALES
7.5 / 10
Por fin!!! Hacía falta algo así en el desafío. Clásico de terror ochentero, del de palomitas y sesión continua, de cuando los encargados de efectos se tenían que exprimir el ingenio, en el que siempre se castiga a los lujuriosos y donde nunca faltan unos toquecitos de humor, y una canción rockera para los créditos finales, en este caso, Brave new love, que abría el primer disco de Alien.
The blob. El terror no tiene forma (1988), de Chuck Russell (Pesadilla en Elm Street 3, La máscara), que escribe también el guion, junto a Frank Darabont (Cadena perpetua, La milla verde, The walking dead), de este remake de la de 1958, The Blob (La masa devoradora), protagonizada por Steve Mc Queen, y que sí tuvo una secuela, aunque tardía. De la que hablamos hoy, a pesar de que queda abierta la posibilidad al final, no llegó a materializarse ninguna.
Por aquí desfilan caras como las de Steve Dillon (John Densmore, el batería en The Doors, de Oliver Stone), Shawnee Smith (que había participado en Águila de Acero junto a Louis Gossett Jr. y que más tarde se convertiría en la imprescindible Amanda Young de la saga Saw), Jeffrey DeMunn (habitual en las pelis de Darabont), Erika Eleniak (la lujuriosa fugaz de la peli, antes de irse a vigilar la costa), Paul McCrane (RoboCop) o Joe Seneca (Willie Brown en Cruce de Caminos, junto a Ralph Macchio y Steve Vai, y que también protagonizó un capítulo de aquella mágica serie de la época, que fue Cuentos Asombrosos, y que me ha venido a la mente gracias a él).
Puro divertimento con sabor añejo para la película con más espíritu Halloween en lo que llevamos de desafío.
The blob. El terror no tiene forma (1988), de Chuck Russell (Pesadilla en Elm Street 3, La máscara), que escribe también el guion, junto a Frank Darabont (Cadena perpetua, La milla verde, The walking dead), de este remake de la de 1958, The Blob (La masa devoradora), protagonizada por Steve Mc Queen, y que sí tuvo una secuela, aunque tardía. De la que hablamos hoy, a pesar de que queda abierta la posibilidad al final, no llegó a materializarse ninguna.
Por aquí desfilan caras como las de Steve Dillon (John Densmore, el batería en The Doors, de Oliver Stone), Shawnee Smith (que había participado en Águila de Acero junto a Louis Gossett Jr. y que más tarde se convertiría en la imprescindible Amanda Young de la saga Saw), Jeffrey DeMunn (habitual en las pelis de Darabont), Erika Eleniak (la lujuriosa fugaz de la peli, antes de irse a vigilar la costa), Paul McCrane (RoboCop) o Joe Seneca (Willie Brown en Cruce de Caminos, junto a Ralph Macchio y Steve Vai, y que también protagonizó un capítulo de aquella mágica serie de la época, que fue Cuentos Asombrosos, y que me ha venido a la mente gracias a él).
Puro divertimento con sabor añejo para la película con más espíritu Halloween en lo que llevamos de desafío.
Valoraciones en tu crítica:
6 / 10
No cabe duda de que uno de los miedos más primigenios del ser humano, al hilo que sugiere el título de la película, es aquel que surge ante lo que escapa a nuestra lógica racional. Ante lo desconocido, indefinible y, como en el caso que les tocará sufrir a nuestros protagonistas, carente de forma. Un concepto muy lovecraftiano —se nota la influencia del escritor— que tanto Chuck Russell como Frank Darabont, perfilando el guion a partir de la película homónima de 1958, supieron trasladar con gran acierto a este salvaje festival de sangre, casquería y masas viscosas venidas del espacio. La esencia primordial del horror cósmico en la forma —o, en este caso, ausencia de ella— de un ente devorador de carne, insaciable como un estudiante asaltando el frigorífico de madrugada, que no hará sino impulsar la diversión de una película donde cada muerte, por sádico que ello resulte, será más disfrutable que la anterior. Y es que el apetito de la gelatina de fresa espacial no conoce límites, pero la creatividad de los guionistas, por suerte, tampoco.
A ese mágico despliegue de desmembramientos, evisceraciones y fluidos corporales varios, todo ello cutre y, a su vez, genialmente escenificado gracias a unos cuidados efectos artesanales, hay que añadirle cierto tono de coña autoconsciente, muy ligado a lo absurdamente inverosímil de muchas de sus escenas, que acaba por romper con cualquier atisbo de formalidad que pudiera encerrar la película. Tampoco es que llegue al punto de presentarse como una parodia de la original, pero sí como una versión más gamberra de ella donde los protagonistas, aquí reducidos a meros estereotipos del cine de terror, no serán más que incautos peones en la brutal carnicería que nuestro flan asesino les tiene reservada. Ni siquiera su lado más serio, como la crítica velada hacia el uso de armas biológicas, es capaz de alejarla de su condición de placer culpable para amantes de las vísceras, los monstruos amorfos y el gore de serie B. Excesiva, surrealista y demencial forma de recordarnos que el terror no tiene forma, pero que, si la tuviera, sería sin duda de moco zampabollos.
A ese mágico despliegue de desmembramientos, evisceraciones y fluidos corporales varios, todo ello cutre y, a su vez, genialmente escenificado gracias a unos cuidados efectos artesanales, hay que añadirle cierto tono de coña autoconsciente, muy ligado a lo absurdamente inverosímil de muchas de sus escenas, que acaba por romper con cualquier atisbo de formalidad que pudiera encerrar la película. Tampoco es que llegue al punto de presentarse como una parodia de la original, pero sí como una versión más gamberra de ella donde los protagonistas, aquí reducidos a meros estereotipos del cine de terror, no serán más que incautos peones en la brutal carnicería que nuestro flan asesino les tiene reservada. Ni siquiera su lado más serio, como la crítica velada hacia el uso de armas biológicas, es capaz de alejarla de su condición de placer culpable para amantes de las vísceras, los monstruos amorfos y el gore de serie B. Excesiva, surrealista y demencial forma de recordarnos que el terror no tiene forma, pero que, si la tuviera, sería sin duda de moco zampabollos.
Valoraciones en tu crítica:
6 / 10
“El terror no tiene forma“ (1988) es el remake de la versión de 1958, dirigida por Irvin S. Yeaworth Jr. y protagonizada por Steve McQueen. Todo apuntaba a que la nueva versión de Chuck Russell iba a ser una copia cutre, una oscura y banal fantasía de serie B, pero es todo lo contrario. Es a la vez una excelente película de serie B y una excelente bazofia que se acerca al género terrorífico/gore en varias ocasiones, ¡y eso es algo que no esperaba!
La trama básica sigue siendo la misma: una cosa gelatinosa del espacio exterior devora todo lo que encuentra a su paso (imaginaros una especie de magma violáceo, parecido a gachas con leche y avena fermentadas). Es inimaginable lo sádicos que pueden haber sido los guionistas, con esta cosa viscosa arrastrándose por desagües, calles y techos. Desde las víctimas que se licúan ante nuestros ojos, literalmente derritiéndose, hasta el cocinero que es succionado por el fregadero (¡oh y la secuencia de la cabina telefónica!). Reconozcámoslo, ¡es emocionante ver tantas muertes sorprendentes, originales y truculentas! Es un remake muy logrado del que no esperaba nada.
La trama básica sigue siendo la misma: una cosa gelatinosa del espacio exterior devora todo lo que encuentra a su paso (imaginaros una especie de magma violáceo, parecido a gachas con leche y avena fermentadas). Es inimaginable lo sádicos que pueden haber sido los guionistas, con esta cosa viscosa arrastrándose por desagües, calles y techos. Desde las víctimas que se licúan ante nuestros ojos, literalmente derritiéndose, hasta el cocinero que es succionado por el fregadero (¡oh y la secuencia de la cabina telefónica!). Reconozcámoslo, ¡es emocionante ver tantas muertes sorprendentes, originales y truculentas! Es un remake muy logrado del que no esperaba nada.
Valoraciones en tu crítica:
7 / 10
The Blob: El terror no tiene forma, interesante y más que divertida película de terror dirigida por Chuck Russell en el que también colabora como guionista de la película.
Largometraje de la década de los ochenta, cuando la ves se nota y lo agradeces, siempre que veo una película de esta época y de los noventa es volver a la infancia. En una época donde el Blandi Blug o coloquialmente "blandiblú" estaba muy de moda entre la chiquillería aparece esta película, ¿la idea surge de ahí? no lo sé, pero el argumento de esta divertida y entretenida película es ese. Un Blandi Blug alienígena llega a la Tierra a través de un meteorito y no es un Blandi Blug cualquiera, este es un auténtico asesino en serie que hará el terror de los habitantes de un pequeño pueblo, Arborville.
Como protagonistas de la película tendremos a una jovencita muy guapa, Meg Penny, interpretado por Shawnee Smith y a un auténtico macarra, Brian Flagg, interpretado por Kevin Dillon, que de forma accidental se toparán con este extraño ser y de forma instintiva serán los que intenten ayudar a las personas que son atacados por este enorme Blandi Blug (se va haciendo más grande cuantas más persona devore) e intentar interceptarlo. También aparece el gobierno con sus científicos de turno, no podían faltar.
La interpretaciones no son una maravilla pero son muy correctas y creíbles, y por su puesto con ese tono ochentero. El actor que más me ha llamado la atención es al que interpreta a Brian, un auténtico Yoyas, un placa placa de la vida. Aquí hace un pequeño cameo Erika Eleniak, ex chica Playboy y que la reconocerás por ser una de las socorristas en Los Vigilantes de la Playa.
Con respecto a la ambientación la veo muy lograda y los efectos especiales pues unas veces te dan una de cal y otra de arena, hay de todo, algún momento de cutrerío importante pero en líneas generales son bastante decentes, parece una película de serie B pero no me atrevería a asegurarlo.
Una película muy palomitera, con un buen ritmo desde el principio hasta el final, que por cierto hablando del final, me ha parecido una salida muy creíble y nada cutre ni esperpéntica. Creo que es una película que suele gustar al espectador, porque es la típica que te dejas llevar y la disfrutas, donde uno de sus puntos fuertes es la cantidad de muertes que hay, puede parecer gore, pero no llega a tanto, aunque son muertes asquerositas.
Personalmente si la recomiendo por entretenida, no es la típica de sobresaltos pero es la típica del bicho que aniquila personas pero con un argumento en general sólido y creíble, he visto películas muchísimo peores y este no es el caso.
P.D. Hay una escena donde se produce una agresión sexual, protagonizada por Erika Eleniak, que hoy en día dudo que se hubiera realizado en esta película aunque su desenlace puede satisfacer al público en general. Por cierto, curioso maletero del agresor sexual.
Largometraje de la década de los ochenta, cuando la ves se nota y lo agradeces, siempre que veo una película de esta época y de los noventa es volver a la infancia. En una época donde el Blandi Blug o coloquialmente "blandiblú" estaba muy de moda entre la chiquillería aparece esta película, ¿la idea surge de ahí? no lo sé, pero el argumento de esta divertida y entretenida película es ese. Un Blandi Blug alienígena llega a la Tierra a través de un meteorito y no es un Blandi Blug cualquiera, este es un auténtico asesino en serie que hará el terror de los habitantes de un pequeño pueblo, Arborville.
Como protagonistas de la película tendremos a una jovencita muy guapa, Meg Penny, interpretado por Shawnee Smith y a un auténtico macarra, Brian Flagg, interpretado por Kevin Dillon, que de forma accidental se toparán con este extraño ser y de forma instintiva serán los que intenten ayudar a las personas que son atacados por este enorme Blandi Blug (se va haciendo más grande cuantas más persona devore) e intentar interceptarlo. También aparece el gobierno con sus científicos de turno, no podían faltar.
La interpretaciones no son una maravilla pero son muy correctas y creíbles, y por su puesto con ese tono ochentero. El actor que más me ha llamado la atención es al que interpreta a Brian, un auténtico Yoyas, un placa placa de la vida. Aquí hace un pequeño cameo Erika Eleniak, ex chica Playboy y que la reconocerás por ser una de las socorristas en Los Vigilantes de la Playa.
Con respecto a la ambientación la veo muy lograda y los efectos especiales pues unas veces te dan una de cal y otra de arena, hay de todo, algún momento de cutrerío importante pero en líneas generales son bastante decentes, parece una película de serie B pero no me atrevería a asegurarlo.
Una película muy palomitera, con un buen ritmo desde el principio hasta el final, que por cierto hablando del final, me ha parecido una salida muy creíble y nada cutre ni esperpéntica. Creo que es una película que suele gustar al espectador, porque es la típica que te dejas llevar y la disfrutas, donde uno de sus puntos fuertes es la cantidad de muertes que hay, puede parecer gore, pero no llega a tanto, aunque son muertes asquerositas.
Personalmente si la recomiendo por entretenida, no es la típica de sobresaltos pero es la típica del bicho que aniquila personas pero con un argumento en general sólido y creíble, he visto películas muchísimo peores y este no es el caso.
P.D. Hay una escena donde se produce una agresión sexual, protagonizada por Erika Eleniak, que hoy en día dudo que se hubiera realizado en esta película aunque su desenlace puede satisfacer al público en general. Por cierto, curioso maletero del agresor sexual.
Valoraciones en tu crítica:
5.5 / 10
el terror no tiene forma es una película de terror y ciencia ficción donde una especie de flubber/fabble asesino o blandiblu como esos que teníamos algunos de niños, un ente que viene del espacio en un meteorito al parecer para devorar a todo lo que se le ponga por delante en un apacible y tranquilo pueblo. No es una idea original pero porque estamos ante un remake, desconozco si mejor o peor.
Es entretenida no lo puedo negar y tiene buen ritmo pero me falla en algunas escenas que las veo surrealistas de esas que te dan risa por como rompen las leyes de la física, totalmente inverosímil y otras como se comenta no estarían bien vistas ahora.
El diseño de sonido es correcto y está bien trabajado en las voces de doblaje en general.
No veo que sean unas grandes interpretaciones pero como película de serie B cumplen más que de sobra comparadas con otras del estilo.
Cuando la he terminado de ver me he dado cuenta que no era la primera vez que la veía pero se me había olvidado bastante lo cual la hace olvidable salvo por su final que es lo mejor de la película, da lo suficiente.
Cuidado con los chicles boomer que los carga el diablo.
Es entretenida no lo puedo negar y tiene buen ritmo pero me falla en algunas escenas que las veo surrealistas de esas que te dan risa por como rompen las leyes de la física, totalmente inverosímil y otras como se comenta no estarían bien vistas ahora.
El diseño de sonido es correcto y está bien trabajado en las voces de doblaje en general.
No veo que sean unas grandes interpretaciones pero como película de serie B cumplen más que de sobra comparadas con otras del estilo.
Cuando la he terminado de ver me he dado cuenta que no era la primera vez que la veía pero se me había olvidado bastante lo cual la hace olvidable salvo por su final que es lo mejor de la película, da lo suficiente.
Cuidado con los chicles boomer que los carga el diablo.
Valoraciones en tu crítica:
6.5 / 10
Pues nada mal para lo que esperaba. The Blob es una película de terror/ciencia ficción que al principio parece la típica película ochentera para todos los públicos, tanto por su estética, como por su tono familiar y hasta de cierto humor, pero que a medida que van pasando los minutos, se va poniendo más gore, más que nada por la matanza que va haciendo el blandiblu del espacio en el pueblo. Pero no termina de ser miedo, no sé si por ese tono que menciono o por el paso de los años, que hace que la vemos con otros ojos. También puede ser porque en el momento cumbre no he podido más que soltar una carcajada al ver a Meg tirarse desde el camión y quedarse enganchada de forma tan ridícula.
Los efectos, aunque a veces den un poco el cante, están bastante logrados, consiguiendo resistir bien el paso del tempo, sobre todo las partes artesanales de las muertes. El croma, no tanto.
Hay varias caras conocidas de secundarios como las del médico, el ayudante del sheriff, el hombre del cine y demás, pero los que más sonaran son sus protagonistas, Kevin Dillon y Shawnee Smith (Saw), que salen superjóvenes.
Los efectos, aunque a veces den un poco el cante, están bastante logrados, consiguiendo resistir bien el paso del tempo, sobre todo las partes artesanales de las muertes. El croma, no tanto.
Hay varias caras conocidas de secundarios como las del médico, el ayudante del sheriff, el hombre del cine y demás, pero los que más sonaran son sus protagonistas, Kevin Dillon y Shawnee Smith (Saw), que salen superjóvenes.
Valoraciones en tu crítica:
6.5 / 10
El terror no tiene forma es una película de terror y ciencia ficción, sobre un ente extraño que devora todo lo que se le pone por delante, se ve que tiene un hambre insaciable. El final no terminó de convencerme, se le nota muy el estilo de la época.
Tiene buena calidad de imagen y sonido, con voces de doblaje castellano a la altura.
Recomendadilla para pasar el rato.
Tiene buena calidad de imagen y sonido, con voces de doblaje castellano a la altura.
Recomendadilla para pasar el rato.
Valoraciones en tu crítica:
6.5 / 10
Un regalito del espacio
El flubber verde era muy travieso, pero unos años antes, en los 80, la edad dorada del cine de entretenimiento juvenil, aterrizó en la tierra el flubber rosa, que era mucho más cabr**.
Sin ninguna otra pretensión que divertir, nos encontramos este terror sin forma, con tamaño creciente, directamente proporcional al número de víctimas que causa, una ligera película de terror de serie B con toques de comedia, de esas que podrían proyectarse en el mismo autocine que sale en la película en cualquier noche de verano, y que su principal valor es no tomarse excesivamente en serio.
Los efectos especiales sin ser excepcionales me han sorprendido gratamente para la época en la se hizo la película, la violencia que emplea sin ataduras es realmente disfrutable, y además no entiende de protagonistas y secundarios, se agradece que en películas de este tipo no sepamos desde el principio quien puede sobrevivir y quien no.
El final es lo que me ha descolocado un poco, quizás buscaban la saga de películas, o simplemente tirarle una puyita a la iglesia, pero el caso es que no le he visto sentido. En cualquier caso película disfrutona, de las que entran fácil en cualquier momento, sorprende para bien.
El flubber verde era muy travieso, pero unos años antes, en los 80, la edad dorada del cine de entretenimiento juvenil, aterrizó en la tierra el flubber rosa, que era mucho más cabr**.
Sin ninguna otra pretensión que divertir, nos encontramos este terror sin forma, con tamaño creciente, directamente proporcional al número de víctimas que causa, una ligera película de terror de serie B con toques de comedia, de esas que podrían proyectarse en el mismo autocine que sale en la película en cualquier noche de verano, y que su principal valor es no tomarse excesivamente en serio.
Los efectos especiales sin ser excepcionales me han sorprendido gratamente para la época en la se hizo la película, la violencia que emplea sin ataduras es realmente disfrutable, y además no entiende de protagonistas y secundarios, se agradece que en películas de este tipo no sepamos desde el principio quien puede sobrevivir y quien no.
El final es lo que me ha descolocado un poco, quizás buscaban la saga de películas, o simplemente tirarle una puyita a la iglesia, pero el caso es que no le he visto sentido. En cualquier caso película disfrutona, de las que entran fácil en cualquier momento, sorprende para bien.
Valoraciones en tu crítica:
6 / 10
The blob, el terror no tiene forma, es una película de terror, y tengo que decir de comedia, protagonizada por Kevin Dillon y Shawnee Smith.
Una forma de vida viscosa ha llegado a un pequeño pueblo para engullir a todos sus habitantes.
Lo primero, ¿nadie más ha recordado a Kevin Bacon en Temblores viendo a Kevin Dillon?
Aquí tenemos una película que seguramente en su día se la tomaron en serio, el pequeño de los Dillon parece darlo todo para ser el nuevo héroe de acción, y Shawnee no está mal tampoco antes de que fuera víctima de Jigsaw, pero tomarla en serio no es la manera de verla hoy en día. No es que haya envejecido mal, es que el envejecimiento la ha cambiado de género. El tono cutre pero a la vez cumplidor de los efectos visuales, junto con la imaginación para algunas muertes, le otorga un punto disfrutón majete. Por un lado, cuando la masa se desplaza, tenemos el cutrerío servido, pero cuando vemos a alguna persona disolviéndose en su interior, pues oye, no queda tan mal, y entiendo que en su día diera bastante grima. Hoy da risa, pero una risa buena. Debería renombrarse y llamarse 'La risilla no tiene forma'.
Cine cutre disfrutón.
Una forma de vida viscosa ha llegado a un pequeño pueblo para engullir a todos sus habitantes.
Lo primero, ¿nadie más ha recordado a Kevin Bacon en Temblores viendo a Kevin Dillon?
Aquí tenemos una película que seguramente en su día se la tomaron en serio, el pequeño de los Dillon parece darlo todo para ser el nuevo héroe de acción, y Shawnee no está mal tampoco antes de que fuera víctima de Jigsaw, pero tomarla en serio no es la manera de verla hoy en día. No es que haya envejecido mal, es que el envejecimiento la ha cambiado de género. El tono cutre pero a la vez cumplidor de los efectos visuales, junto con la imaginación para algunas muertes, le otorga un punto disfrutón majete. Por un lado, cuando la masa se desplaza, tenemos el cutrerío servido, pero cuando vemos a alguna persona disolviéndose en su interior, pues oye, no queda tan mal, y entiendo que en su día diera bastante grima. Hoy da risa, pero una risa buena. Debería renombrarse y llamarse 'La risilla no tiene forma'.
Cine cutre disfrutón.
Valoraciones en tu crítica:
4 / 10
Por lo que he podido ver esta película es un remake de una producción de los años 50 protagonizada por nada más ni nada menos que Steve McQueen. Y aquí no nos quedamos cortos ya que el elenco de este film está plagado de actores de cierto renombre y con un guionista que no se queda atrás (el de Cadena Perpetua, ojito al dato).
Presentaciones y datos curiosos aparte, estamos ante una película típica, pero típica y tipiquísima. Quiere decir: monstruo llega a un pueblo de Estados Unidos y se lía parda, las fuerzas especiales tienen que hacer aparición y... fin!
Como buena película ochentera que es no pueden faltar adolescentes flipaos, viejos gruñones y unos efectos especiales acojonantes (de lo malos que son, que por otra parte a mí personalmente me encantan y me generan hasta cierta ternura).
No es el peliculón del siglo y alguna parte se vuelve un poco tediosa, pero está divertido ver cómo el flubber de hacendado se zampa a la gente
Presentaciones y datos curiosos aparte, estamos ante una película típica, pero típica y tipiquísima. Quiere decir: monstruo llega a un pueblo de Estados Unidos y se lía parda, las fuerzas especiales tienen que hacer aparición y... fin!
Como buena película ochentera que es no pueden faltar adolescentes flipaos, viejos gruñones y unos efectos especiales acojonantes (de lo malos que son, que por otra parte a mí personalmente me encantan y me generan hasta cierta ternura).
No es el peliculón del siglo y alguna parte se vuelve un poco tediosa, pero está divertido ver cómo el flubber de hacendado se zampa a la gente
Valoraciones en tu crítica:
6.5 / 10
Esta nueva versión de The Blob arranca bastante bien: un meteorito trae una especie de moco alienígena que empieza a devorar gente en un pueblo pequeño. Los personajes son mejores y más humanos que en la versión original, así que el terror te pega más cuando empiezan a caer. ¡Hasta aquí todo perfecto! Pero luego la cosa se va de madre: llegan unos funcionarios del gobierno que complican todo con un lío ridículo y lleno de clichés.
Hay algunas escenas clavadas de la primera, como el cine y el congelador, pero ahora con más presupuesto y mejores efectos, así que el susto es real al principio. Pero, conforme crece la criatura, la tensión se pierde un poco. En resumen, va bien hasta la mitad, luego pierde el ritmo.
Hay algunas escenas clavadas de la primera, como el cine y el congelador, pero ahora con más presupuesto y mejores efectos, así que el susto es real al principio. Pero, conforme crece la criatura, la tensión se pierde un poco. En resumen, va bien hasta la mitad, luego pierde el ritmo.
Valoraciones en tu crítica:
7 / 10
Una grata sorpresa. Estas películas de años atrás pueden gustarte mucho, no gustarte nada o echarte unas risas por cómo está hecha. Y en este caso, me ha gustado bastante.
Tiene bastantes puntos cómicos, cosa que no entorpece el terror, le da un toque.
La primera aparición del "bicho" ya es una declaración de intenciones en esta película, es muy buena.
Los efectos, a pesar de que ya tienen sus añitos, muchos de hecho, son más que buenos...hasta que llega el final, ahí cantan un poco. Pero el resto muy buenos.
La sorpresa de cargarse al tipo bueno, deportista...el que tenía toda la pinta de ser el protagonista es brutal.
La actuación de Shawnee Smith me ha parecido de lo más flojo, en vez de una adolescente, me daba más de una mujer de pasada la treintena o incluso mayor. No representa en nada a su personaje, aunque es cierto que puede que sea culpa del doblaje, nunca me pararé a descubrirlo.
Tiene momentos que son bastante violentos, sin entrar en lo gore, y el "bicho", el cabrón, acaba con todo, es muy buen "villano".
La segunda sorpresa y salió el gordo, ¡es un jodido virus experimental!. Nos han engañado desde el minuto uno haciéndonos creer que era algo alienígena, que buen engaño. Y digo bueno porque en muchos casos suelen generarnos chascos, pero este para nada, una sorpresa de las buenas.
Último detalle, l os trozos de la calle los recogen, el cura tiene otros tantos, pero ¿qué pasa con los otros trozos que se quedaron en el congelador del restaurante?
Para resumir, buena peli a pesar de sus años, entretiene, tiene un buen bicho, sorpresas y unos efectos que no chirrían en absoluto. Una gozada.
Tiene bastantes puntos cómicos, cosa que no entorpece el terror, le da un toque.
La primera aparición del "bicho" ya es una declaración de intenciones en esta película, es muy buena.
Los efectos, a pesar de que ya tienen sus añitos, muchos de hecho, son más que buenos...hasta que llega el final, ahí cantan un poco. Pero el resto muy buenos.
La sorpresa de cargarse al tipo bueno, deportista...el que tenía toda la pinta de ser el protagonista es brutal.
La actuación de Shawnee Smith me ha parecido de lo más flojo, en vez de una adolescente, me daba más de una mujer de pasada la treintena o incluso mayor. No representa en nada a su personaje, aunque es cierto que puede que sea culpa del doblaje, nunca me pararé a descubrirlo.
Tiene momentos que son bastante violentos, sin entrar en lo gore, y el "bicho", el cabrón, acaba con todo, es muy buen "villano".
La segunda sorpresa y salió el gordo, ¡es un jodido virus experimental!. Nos han engañado desde el minuto uno haciéndonos creer que era algo alienígena, que buen engaño. Y digo bueno porque en muchos casos suelen generarnos chascos, pero este para nada, una sorpresa de las buenas.
Último detalle, l os trozos de la calle los recogen, el cura tiene otros tantos, pero ¿qué pasa con los otros trozos que se quedaron en el congelador del restaurante?
Para resumir, buena peli a pesar de sus años, entretiene, tiene un buen bicho, sorpresas y unos efectos que no chirrían en absoluto. Una gozada.
Valoraciones en tu crítica:
7.5 / 10
Un clásico que ha envejecido increíblemente bien. Cuando una película de los 80 introduce un pequeño pueblo, sheriffs, jóvenes en la edad del pavo, el chulito del pueblo, la chica guapa, el alienígena malo, "los científicos",...es que nada puede salir mal :D
Es una formula que antes funcionaba muy bien como terror y ahora muy bien como entretenimiento, seguramente sea porque no es lo mismo ver esto de niño que siendo adulto, lo que antes te hubiera aterrorizado ahora se convierte en una sonrisilla mientras disfrutas del moco alienígena comiéndose a la gente :D
Película muy entretenida y muy recomendada para estas fechas, no te aburrirás en ningún momento.
Es una formula que antes funcionaba muy bien como terror y ahora muy bien como entretenimiento, seguramente sea porque no es lo mismo ver esto de niño que siendo adulto, lo que antes te hubiera aterrorizado ahora se convierte en una sonrisilla mientras disfrutas del moco alienígena comiéndose a la gente :D
Película muy entretenida y muy recomendada para estas fechas, no te aburrirás en ningún momento.
Valoraciones en tu crítica:
3 / 10
No le guardaba un grato recuerdo a esta película. De hecho no recordaba ni una coma de ella. La había olvidado completamente.
Aprovechando que apareció por el desafio y viendo que ya la había visto he decidido darle una segunda oportunidad.
Y ha sido una pérdida de tiempo. Porque parece que el que está a los mandos la borro por muchos motivos.
Todo tiene la misma consistencia que esta sustancia, pringosa y resbaladiza, sin forma definida y una estructura que a falta de forma se desparrama por cualquier rincón.
Y todavía le estoy buscando la comedia, pero fijo que supera con creces la catalogación de serie B. Se va a la Z sin dudarlo.
Igual se la pongo a mi niña para que no me torture más con el maldito slime a riesgo de crearle un trauma.
Aprovechando que apareció por el desafio y viendo que ya la había visto he decidido darle una segunda oportunidad.
Y ha sido una pérdida de tiempo. Porque parece que el que está a los mandos la borro por muchos motivos.
Todo tiene la misma consistencia que esta sustancia, pringosa y resbaladiza, sin forma definida y una estructura que a falta de forma se desparrama por cualquier rincón.
Y todavía le estoy buscando la comedia, pero fijo que supera con creces la catalogación de serie B. Se va a la Z sin dudarlo.
Igual se la pongo a mi niña para que no me torture más con el maldito slime a riesgo de crearle un trauma.
Valoraciones en tu crítica:
6 / 10
Solvente remake de la película de 1958 sobre un ente amorfo caído en medio de un pueblo, con el consiguiente terror inenarrable que acaecerá en el lugar. Muy inspirada por las creaciones de H.P. Lovecraft y con cierto tono gamberro, más disfrutable e incluso divertido que la original en su apartado visual y más en concreto en la sucesión de deformaciones, monstruosidades y repulsiones de alto contenido gráfico. El homenaje a las películas clásicas de monstruos amorfos se pasa con nota, aportando su propia identidad para darle ese toque ochentero que tan bien le sienta.
Juguetona para amantes del terror gelatinoso con el sello de Lovecraft.
Juguetona para amantes del terror gelatinoso con el sello de Lovecraft.
Valoraciones en tu crítica:
Mi Opinión / Critica de El terror no tiene forma
Puedes valorar del 1 al 5 y de manera opcional las sub-categorias que desees. Si tienes dudas sobre lo que supone darle un 5 a ciertas categorias, más abajo encontrarás información al respecto.