Una dulce mentira. Y aquí estamos, posiblemente la mayoría nos hayamos acercado por Audrey Tautou, quien probablemente para bien y para mal, sea recordada por su papel de "Amelie". Las actrices francesas tienen un algo especial, que las hace ser muy chic, pero en ocasiones, destilan demasiado esa esencia y pueden ser odiosas... pero eso también es parte de su encanto. Aquí tenemos una comedia romántica para su engrandecimiento, aunque, en muchas ocasiones, creo que puede resultar irritante, boba, cargante... la cuestión es que el personaje es así, pero que si desde fuera, hay quien le pone un plus, pues con mayor razón todavía.
Como muchas comedias románticas, suele haber tres en el candelero y esta es una de ellas. Hay un reparto coral que proporciona los tips que podemos encontrar en otras comedias francesas, al igual que vemos los de comedias españolas, es algo que se reconoce, y que proporciona algo más de ambientación y descanso general de la trama principal. Para mi quien lo hace mejor es la madre de ella, e incluso, sensualmente, resulta mucho más atractiva (no sabía la edad.. y viendo después... pues vaya vaya..), pero en cuestión de emotividad, en cuestión de los momentos cómicos y dramáticos, es quien sostiene la película ciertamente. El protagonista masculino, cumple, pero tampoco me ha parecido la panacea; tiene un buen poso inicial, y detalles por el desarrollo, pero no me acaba de transmitir tanto, al igual que con Tautou, que en pocos momentos da un poco de tregua, resultando su personaje, a momentos desagradable; pero siempre con ese puntito para que le perdonemos y queramos ver un poco más.
Tiene algunos momentos entretenidos, con el padre, pero seguramente, Nathalie Baye es la que consigue transmitir más momentos sentimentales en sus relaciones con el resto de personajes. Para pasar una tarde, está bien; pero no esperéis la nueva Amelie ni nada por el estilo, siendo bastante similar a otra comedia romántica suya "Juntos, nada más".
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