Reconozco que soy de los que no tenía muchas esperanzas puestas en Matthew McConaughey en los comienzos de su carrera. Pero mira tú por dónde, el bueno de Mateo se ha convertido en uno de los actores más solventes de su generación aunque, eso sí, con cierta predilección por los papeles de crápula simpatiquillo.
Pues The beach bum es un caramelito para McConaughey, un personaje extravagante, excesivo e histriónico que orece al actor la posibilidad de lucirse en cada minuto de la película. ¿Pero hay algo a parte de eso? Pues mi problema es que no logro empatizar con el personaje, no comprendo (a ver las entiendo a nivel intelectual, eso no es difícil, pero no las comprendo a nivel personal) sus motivaciones y el cierto tono de elogio a su forma de vida, a la libertad individual, al pasar por la vida haciendo que ésta sea extraordinaria... pero ¿esa es la forma? Eso me crea un distanciamiento insalvable que me aleja de la película y que, pese a reconocerle cierta gracia en sus planteamientos y desarrollo, me genera una incomodad que no soy capaz de obviar. Tampoco converjo con su antítesis, el personaje encarnado por Jonah Hill, que dice una frase estupenda " ***contenido con spoilers*** ". Una frase que define una forma de ser igualmente detestable, pero que no legitima al extremo opuesto.

Pues la peli va de maconajiu quedando con algunos de sus coleguitas famosos para hacer una peli en la playa, y echarse unas risas mientras se pillan sus buenos pedos.
La historia consta de pequeños sketches concatenados, para lucirse con cada colega y hacer camaradería, sin necesidad de interpretar mostrándose tal cual son, con un hilo conductor sin pies ni cabeza, y a tope de porritos, porque allí ya es legal.

Todo envuelto con la fotografía de CSI Miami, con mucha puesta de sol, mucho colorín, y haciendo apología del tanto tienes tanto vales y toda la filosofía más chancra de los EEUU, dejando claro en que ellos ya son tan guais (maconajiu & co.) que ni dinero necesitan para ir de sobrados por la vida.