Junio de 1960, en Finlandia, cuatro adolescentes van de acampada al lago Bodom. Al día siguiente, tres de ellos aparecen brutalmente asesinados y el cuarto gravemente herido. Cuando se reabrió el caso en 2005, el cuarto adolescente sugirió que uno o varios misteriosos desconocidos eran los responsables del asesinato. El caso sigue oficialmente sin resolver.
Un misterioso crimen que traumatizó a todo un país, la fantasía en torno a los asesinatos del lago Bodom estaba destinada a alimentar el cine de género en algún momento. Tras un found-footage húngaro ("Bodom"), ahora le toca el turno a un finlandés, Taneli Mustoten, más conocido por sus comedias, que por coescribir y dirigir un largometraje sobre el tema
En el presente, cuatro adolescentes regresan al campamento cercano al famoso lago para intentar reconstruir los sucesos de 1960 y explorar la posibilidad de un nuevo rastro. Por supuesto, en el género de las "ideas no muy brillantes", su planteamiento está en lo más alto de la lista a la vista de los trágicos acontecimientos que se suceden...
Bastante inteligentemente construida en tres partes, "Lake Bodom", sin embargo, se queda a menudo con el lodo al cuello en lo que se refiere a la credibilidad de las motivaciones de sus personajes.
De hecho, toda la historia se basa en una cuestión de fingimiento, que en un momento u otro alcanza a cada uno de los protagonistas de forma violenta. En el contexto arquetípico del slasher del bosque de la primera parte, la escritura típicamente nórdica y los intérpretes aportan un bienvenido toque de realismo al jugar con los códigos conocidos de este tipo de películas, pero la película pierde su soberbia calidad cuando se desvela el giro de mitad de camino (aunque bien visto). En cuanto los personajes implicados empiezan a explicarse, la noción de credibilidad desaparece poco a poco del ”Lake Bodom” y de su reparto, dada la discrepancia entre las causas triviales y la gravedad de la situación (la heroína parece plantearse las preguntas adecuadas con bastante retraso). El tercer acto, de vuelta a la vía básica de la supervivencia, sólo puede apoyarse en el aura de misterio que rodea a al lago Bodom para intentar trascender el contenido de los acontecimientos revelados a modo de conclusión.
Visualmente pulida y astuta en su narración, "Lake Bodom" lamentablemente se pierde en el camino cuando se trata de manejar sus giros con respecto a sus personajes, fallando en hacernos creer en ellos a fuerza de explicaciones desordenadas. Al final, da la sensación de ser una película que se ha creído demasiado lista, a pesar de no haber consolidado los pilares sobre los que descansaba su ambición.