Críticas de Azul mar
Borrosos, cubiertos de algas y humedecidos por el tiempo, los recuerdos del mar emergen como una imagen imprecisa, accesible solo a través de los sueños o del cine. Es en ese momento cuando el agua puede cambiar de color, y el mar deja de ser azul, variando entre la luz y la oscuridad en la memoria de la cineasta.