Primer largometraje de la breve pero intensa carrera de Satoshi Kon (que en paz descanse), un pequeño rompecabezas mental de apenas 80 minutos donde la realidad se mezcla con los sueños, retorciendo la perspectiva del espectador y desordenando las piezas del puzzle pero sin ocultarte ninguna de ellas, para que llegado el momento puedas encajar todo en un final que sabe recompensar la atención requerida durante todo el metraje.

Mima Kirigoe, una chica de 21 años que abandona su grupo de J-pop para convertirse en actriz, es la protagonista de este thriller psicológico que sirve también como una crítica al mundo de la fama y en concreto al de las idols y a cómo pueden llegar a ser tratadas como pura mercancía. Un mundo que en ocasiones puede resultar más oscuro de lo que aparenta y donde la superficialidad del espectáculo ofrece un trágico contraste con el miedo al fracaso, la obsesión y la presión existentes tras el telón.

El impacto de esta película fue tal que incluso influyó a otras grandes obras como 'Black Swan' y 'Requiem for a dream' de Darren Aronofsky, y aunque el estilo y el universo onírico creado por Satoshi Kon no gustará a todos, está claro que estamos ante un punto clave en la historia de la animación. Para gustos, colores, y para mí este 'Perfect Blue' es un color fascinante, un azul casi perfecto.

Clásico del anime en clave de thriller y terror psicológico que gira alrededor del exigente mundo de los 'idols' japoneses y el J-Pop, que fue más que inspiración para 'Cisne negro'. La trama y el montaje juegan mucho con ***contenido con spoilers*** mezclado con ***contenido con spoilers*** y ése es uno de sus puntos más fuertes.

Perfect Blue es otro de esos tantos clásicos que tenía pendiente por ver desde hace mucho. A diferencia de otros casos, no me arrepiento de haber tardado en verlo, no porque no valga la pena, sino porque une el ser una película que se hace compleja (teniendo tres realidades superpuestas), con el resultar extremadamente dura en ciertos momentos; necesitaba estar en un estado de ánimo adecuado tanto para soportar ciertas escenas como para ser capaz de seguir la línea argumental.

La trama es básicamente lo que plantea la sinopsis; ocurren más cosas, por supuesto, pero la base sobre la que se sostiene todo es eso; normal, si consideramos que la película no llega ni a la hora y media, lo que extrañamente no afecta a su ritmo. En estas películas, cuya sinopsis es bastante detallada en cuanto a su trama, suele pasar que el comienzo resulta lento porque lo importante tarda en llegar; aquí no, y no por ello es un comienzo acelerado para meternos en el meollo del asunto.

Luego la trama irá entremezclando las tres realidades: el mundo «real», las alucinaciones con la «verdadera» Mima y las escenas de la serie en la que participa la protagonista.

Como dije en mi crítica a 三度目の殺人 (The Third Murder), la verdad puede resultar un prisma complejo formado por diferentes verdades que, como ocurre aquí, se superponen. Si esto no llega a ser un ejemplo de efecto Rashomon es porque al final vemos que las distintas verdades nos llevan a La Verdad, que sin quitar valor al resto de verdades que hemos visto, las ponen en segundo plano como si de las sombras en el mito de la caverna se trataran.

El desenlace llega casi por sorpresa, porque parece que ya hemos cerrado la trama, incluso aunque algún elemento quede en el aire (concretamente ***contenido con spoilers*** ) parece que eso simplemente viene a indicar que ***contenido con spoilers*** , y entonces, el laberinto de espejos en el que estábamos se rompe, haciendo añicos todas las verdades que hemos visto para dejar la que tiene verdadera importancia: ***contenido con spoilers*** .

A su vez, aunque toda la sombra de acoso que hay desde prácticamente el comienzo pesa en el film y lo hace duro de ver (porque es algo real, del que hemos podido ver ejemplos o incluso vivirlos), hay escenas que llegan a resultar dolorosas, incluso sabiendo que no son reales (no por ser esto animación, sino porque dentro de la trama es una escena actuada dentro de la serie) como es el caso de la escena de ***contenido con spoilers*** .

Con todo esto nos presentan una dura crítica al mundo del espectáculo en general, pero de los idols en particular, que acaban resultando casi un universo aparte con toda esa necesidad que imponen a sus miembros (en especial las femeninas) de parecer inocentes y no sexualizarse lo más mínimo, para que un grupo de hombres inmaduros que gasta su sueldo en merchandising del grupo, sean los que las sexualicen en privado. Lo que tratándose de Japón choca (o tal vez complementa) el hecho de ser el lugar del nacimiento del ero-guro-nansensu por ese mismo tabú.

En definitiva, es una película que puede resultar dura de ver, así como compleja; no la recomiendo para ponerla cuando quieres desconectar, sino para cuando estés con la cabeza despejada. Aun así la recomiendo porque es una película magnifica que a medio camino entre el thriller psicológico y el criminal, te muestra sin cortapisas la dura vida de una mujer joven que decide meterse en el mundillo del espectáculo y lo que eso acaba implicando para su salud mental.

'Perfect Blue' es un thriller psicológico brutal. Un clásico de la animación que sorprende por ser una opera prima, algo difícil de creer dado el magnífico resultado. Sus influencias siguen estando presentes a día de hoy. Mi primer contacto con Satoshi Kon ha sido muy bueno.

El efecto mind blowing funciona como un tiro, así que todos aquellos que disfruten con esto deberían apuntar la obra de Kon. El final permite da una interpretación ligeramente clara a toda la trama, así que para mí cumple con todos los requisitos que exijo en este tipo de películas: juego mental y conclusión clara.